Otra vez de la mano de su principal subproducto, la harina, los futuros de la soja en Chicago escalaron ayer 3,5%, o 13 dólares por tonelada, para cerrar en valores máximos desde fines de agosto.

Tras tocar u$s 384 la tonelada, los contratos más activos –noviembre– terminaron la rueda en u$s 383,2 la tonelada, ese nivel no se registraba desde el 20 de agosto último. Con la nueva escalada, la soja repuntó 15%, o 50 dólares por tonelada, desde el mínimo en cuatro años (u$s 332 la tonelada, registrado el pasado 1º de octubre).

Así en los 20 días de operación que van del mes, las 19 millones de toneladas de soja argentina que todavía no ingresaron al circuito comercial se revaluaron en casi u$s 970 millones.

Eso porque según datos del Ministerio de Agricultura, al 22 de octubre último, la industria y exportación había declarado compras por 36 millones de toneladas.

La producción del ciclo 2014/15 está estimada en 55 millones de toneladas.

Junto con la oleaginosa, también escalaron a máximos para el último mes y medio de operación el trigo y el maíz.

El principal impulsor de las cotizaciones del producto estrella de exportación argentino es el fuerte alza que viene registrando uno de sus subproductos: la harina de soja, que ayer superó los u$s 400 la tonelada corta (0,91 toneladas) en Chicago, el mayor nivel de los últimos 3 meses y muy cerca de los máximos del último semestre.

Esta semana, la harina de soja ganó casi 6%, la mayor racha alcista de los últimos 6 años y se anota desde principios de octubre, cuando marcó su mínimo desde 2010, una escalada de 35%.

La complicada situación logística en Estados Unidos para llevar la harina de soja desde las fábricas de procesamiento a los puertos, sigue sin solucionarse y eso impulsa los precios, sobre todo porque los exportadores norteamericanos tienen compromisos récord para el producto, principalmente desde Asia para alimentación animal.

En las últimas semanas, China canceló varios barcos con harina de soja estadounidense, y se volcó a proveerse del producto en Brasil y la Argentina.

Pero el problema logístico, coinciden los analistas, es un factor que deberá acomodarse más en el corto que en el mediano plazo. Un dato que parece confirmar esa afirmación es los futuros de la soja más alejados (enero/mayo) están unos u$s 30 a u$s 35 la tonelada por debajo de las posiciones más cercanas.

Los renovados bríos externos tuvieron réplica en los negocios locales. En Rosario, la soja disponible se pagó a u$s 299 la tonelada, 2% por encima del cierre previo y ganó 29% desde el mínimo marcado el 3 de octubre pasado (u$s 231,3). Las posiciones a cosecha (mayo ‘15 en tanto, se acercan a los u$s 260 por tonelada), con lo que se alivia aunque de manera temporal la preocupación por la escasa rentabilidad que dejaría la soja nueva en gran parte del país.

Fuente: Diario El Cronista Comercial