El presidente del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), Francisco Anglesio, puso en valor el desarrollo de los productores locales, muchos de ellos basados en la agricultura familiar, como objetivo para llegar al autoabastecimiento de la región.

Entrevistado por TiempoSur, el funcionario reseñó que en la agricultura familiar en Argentina están aglutinados alrededor de 230 mil productores que representan el 65% de los productores del sector agropecuario del país.

“Hace muchos años venimos trabajando desde la institución y desde el Ministerio de Agricultura en fortalecer y dotar de herramientas y tecnologías a este sector, es así que se han desarrollado alrededor del país 5 centros de investigación para la agricultura familiar, y eso nos ha llevado también a avanzar hacia distintas áreas de la Argentina donde necesitamos aún crecer en ese desarrollo”, comentó.

Al respecto, sostuvo que están impulsando el trabajo con los productores de la región patagónica a los efectos de aumentar la producción pero sobre todas las cosas “dotarlos de herramientas como avanzar en la comercialización”.

Anglesio apuntó que el 20% de la renta se la queda quien produce el producto, o sea el horticultor o el productor familiar, el 40% queda en manos del distribuidor y el 40% restante de quien lo comercializa. Pero el productor, que es el que menos gana en esa cadena, pone además el 40% del capital. “Eso nos hace pensar que tenemos que darle esa herramienta en la etapa de la comercialización”, afirmó al respecto.

Sobre Santa Cruz indicó que vienen desarrollando distintos planes, entre los que nombró al INTA VA (Inta Valor Agregado), que se hace presente en cada una de las localidades a trabajar con los intendentes en sus municipios. Y a su vez, el trabajo con distintos productores a través del programa nacional que se llama Cambio Rural 2, donde se pueden nuclear de 6 a 8 productores para desarrollar un proyecto y a través del mismo, el INTA les financia el técnico que los asesora y les desarrolla el proyecto.

“Hemos trabajado con productores de la zona de Calafate, para regar una superficie del río Bote que todavía no hemos definido exactamente, pero que hemos estado haciendo un relevamiento con técnicos que llegaron de Córdoba y Buenos Aires, apoyados por la regional y experimental de Santa Cruz”, comentó.

Sostuvo además que en provincias como la nuestra, las actividades extractivas tenderán a su agotamiento, por lo que “necesitamos dotar a los productores de herramientas que puedan transformar su realidad en el mediano y largo plazo” y añadió: “Tenemos que desarrollar economías regionales, autoproducción, autoabastecer a las comunidades desde el punto de vista de la horticultura, la producción de cerdos, aves, etc. de modo de llegar a las góndolas con un producto local”.

Finalmente, no dudó en sostener que en verduras Santa Cruz tranquilamente podría autoabastecerse con el desarrollo de productores locales que logren incorporar sus productos en las góndolas. En cuanto a frutas, explicó que no se tiene tanta elasticidad y se seguirá dependiendo del norte del país, excepto algunas de ellas que se desarrollan en Los Antiguos, Perito Moreno o Calafate. “Con el acompañamiento del Estado, no tengo dudas que podemos lograr en el cortísimo plazo el autoabastecimiento”, dijo.