Funcionarios de la cartera agropecuaria convocaron a los cerealistas, que apostaron a seguir negociando y no confrontar

El Ministerio de Agroindustria de la Nación convocó ayer a los presidentes de los Centros de Corredores de Rosario y Buenos Aires para analizar el impacto del arancel de $300.000 al año que la Comisión Nacional de Valores (CNV) aplicó sin previo aviso para fiscalización y control de las operaciones de futuros y derivados agropecuarios que, según los agentes, dejará afuera de los mercados a término a la mayoría de los operadores.

Los cerealistas fueron recibidos a primera hora de la tarde por el subsecretario de Mercados, Jesús Silveyra, y el jefe de Gabinete de esa cartera, Daniel Assef. Los presidentes de ambos centros, Carlos Landi y Miguel Simioni, explicaron la postura del sector, los efectos negativos que puede traer para el Mercado que queden menos agentes y también comentaron la tensa reunión con CNV de la semana pasada en la que el organismo aclaró que no habrá vuelta atrás y que a los operadores cerealistas les queda ver la mejor forma de acomodarse a las nuevas exigencias.

También transmitieron el malestar por lo inconsulto y sorpresivo de la medida, ya que había una mesa de diálogo abierta en la que se estaban tratando varios temas vinculados a cambios en las exigencias y requerimientos a los agentes, pero en la que nunca se habló de la imposición de aranceles. Es más, esa actitud mete ahora ruido en el resto de los temas que deben seguir tratando porque dañó el lazo de confianza de los agentes para con los funcionarios, quienes días antes de publicarse la resolución negaron estar estudiando el tema a los corredores que los consultaron por las versiones que publicaba la prensa.

Pese a todo eso, los Centros ratificaron ante Agroindustria que seguirán apostando por la vía negociadora y que su objetivo no es patear el tablero sino seguir conversando con el gobierno, una estrategia de apuesta a la búsqueda de consensos que es un sello de las gestiones cerealistas.

El mensaje que se llevaron de Agroindustria es que, si bien esa cartera no va reprobar o criticar una medida tomada por otra área del gobierno, sí van a buscar que CNV se muestre lo más permeable posible a las propuestas de adecuamiento a esta nueva exigencia que presenten los cerealistas, una puerta de negociación que sí les dejó abierta el regulador bursátil.

Ayer, los Centros quedaron en trabajar de manera conjunta en la elaboración de una propuesta a presentar a CNV, que arribará con el aval de las Bolsas, los Mercados y ahora hasta de Agroindustria, quienes se pusieron a disposición de los agentes para aportar en la solución del conflicto. El plazo de las negociaciones vence a fin de año ya que en enero de 2018 comienzan a regir los aranceles.

Previo a la reunión en Agroindustria, Landi encabezó una concurrida reunión en la Bolsa con los asociados de su Centro en el que informó todo lo ocurrido (incluido el fuere apoyo que tuvo de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires en la última reunión de Consejo Directivo). Los asociados respaldaron lo actuado por el Centro y le dieron mandato para seguir negociando con CNV una salida.

Por su parte, Simioni convocará en las próximas horas a los asociados del Centro de Rosario para informar los detalles de las últimas gestiones realizadas y escuchar opiniones. Antes de viajar a Buenos Aires estuvo reunido con el asesor legal de Centro, Ricardo Moscariello, quien también recomendo la estrategia de negociar con el organismo los términos de la adecuación para evitar que los agentes terminen afuera del mercado.

Fuente: Punto Biz - Mariano Galíndez