En primer lugar conversamos con Gerónimo Cerini, Socio de El Hinojo, quien comentó acerca de la agricultura certificada. En este sentido, explicó que se trata de un sistema de gestión de calidad que lo promueve Aapresid, a través del cual se genera un registro y sistema de control de todas las tareas que se realizan a campo en lo que es agricultura y ganadería, a fin de proceder a una evaluación de los datos y redefinir objetivos.

Para lograr esto, es una tarea que conlleva una carga administrativa mayor en lo que refiere a sistematizar los datos a través de registros, y además es importante la actualización permanente de la normativa vigente.

Entre las ventajas de la certificación se puede mencionar una a corto plazo, que es la generación de bonos que se pueden comercializar y vender. Otra es la incorporación de la práctica de control y certificación a la actividad y poder así acceder a mercados que así lo estén demando.

Consultado por los principales puntos a tener en cuenta, Cerini enumeró: la conservación de los suelos, medir erosión, medir balance de nutrientes, medir el impacto de fitosanitarios. “En nuestro caso nos propusimos no utilizar ningún producto banda roja, aplicar como máximo un 10% de banda amarilla y el 90% de bandas verdes o azules”- explicó.

Por ultimo recordó que Hinojo realizó la primer certificación fue en 2012, empezando en un campo propio y luego en un campo arrendado en Aranguren, siempre con el objetivo de mostrar es que se puede hacer una agricultura amigable con el ambiente.

Cabe aclarar que la certificación de establecimientos está a cargo de empresas certificadoras.

Se certifican los establecimientos con la norma de agricultura certificada, a su vez hay una norma internacional que es la RTRS que se aplica a soja, que agrega un punto fundamental que es la cuestión social.

Líneas seguidas dialogamos con Ricardo Melchiori del INTA Paraná, quien brindó información acerca de las estrategias de fertilización para el maíz.

Lo primero que se debe realizar es el conocimiento de las condiciones iniciales del lote, como primer elemento para tomar posteriores decisiones agronómicas. “En nuestra provincia, el fósforo y nitrógeno son los elementos deficitarios, a partir de allí se deben definir las dosis, teniendo en cuenta las expectativas de rendimiento. También hay que tener en cuenta el momento recomendado para fertilizar y con qué fuente de fertilizante”- sintetizó el ingeniero.

En el caso del cultivo de maíz, es particularmente sensible a la disponibilidad de zinc, que manifiesta tempranamente la deficiencia y es importante, en este sentido, abastecerla la necesidad temprana.

Además recomendó que en campañas como estas donde hay mucha agua, hay que ser muy cuidadoso con el momento de fertilización, a la vez que si deferimos estos momentos de fertilización hay que disponer de una elevada capacidad operativa para entrar a los lotes.

“El cultivo de maíz -pasado el estadio de seis hojas- el desarrollo es muy rápido, entonces si tenemos alguna inclemencia del tiempo podemos tener alguna situación de que -por diferir no podremos entrar- pese a ello existen alternativas tecnológicas y la posibilidad de intervenir con fertilizantes líquidos siempre teniendo los cuidados pertinentes” –explicó Melchiori.

En el caso de tardar la siembra del maíz, se puede aprovechar ese retraso para generar una mayor acumulación de agua y a la vez puede ser una oportunidad que el suelo libere más nitrógeno, mineralizándolo desde la materia orgánica por lo que los productores bajamos los niveles de fertilización de los suelos.

Martín Marzetti, es Gerente de REM Aapresid. Con el hablamos sobre las malezas resistentes.

“Hoy hay lotes muy complicados con yuyos colorados y lotes que todavía no lo tienen, además hay presencia de las gramíneas que son las malezas típicas de la región”- afirmó el ingeniero. En este sentido señaló la importancia de realizar los monitoreo de los lotes y la aplicación de pre emergentes.

Debido al significativo crecimiento de estas malezas en Entre Ríos, Marzetti recomendó un buen manejo de todo el sistema en su conjunto, teniendo en cuenta la rotación de cultivos, los monitoreos, conocer los herbicidas, la calidad de semilla, entre otros. Además señaló a los cultivos de cobertura como una estrategia que está dando buenos resultados y que hay que tener en cuenta.

Estos cultivos de cobertura permiten además ahorrar fertilizantes ya que aportan carbono y nitrógeno a los lotes.

Consultado sobre las perspectivas de esta campaña, el ingeniero consideró que viene muy bien en cuando a humedad, aunque el invierno fue cálido hay una primavera bastante fresca.

Por otro lado estuvimos dialogando con Francisco Martellotto, quien es responsable Técnico Comercial Zona Centro de Compo Expert.

En esta oportunidad explicó sobre la presencia del zinc en los suelos. “Nuestros suelos tienen zinc, no le hemos prestado mucha atención y lo hemos ido extrayendo. Hoy gracias al acompañamiento del nitrógeno con zinc, la eficiencia del uso del nitrógeno es mucho más alta”-

El zinc por ser un micro elemento no necesita aplicar grandes cantidades, la forma habitual de aplicación es por suelo, por semilla y follar y de acuerdo a cada condición, cada lote y a cada productor.

El Representante Técnico Comercial de Yara Argentina, Rodrigo Cantero, brindó un panorama de cómo viene trabajando la empresa en la presente campaña de granos.

Para lo que es maíz, la compañía ofrece una fertilización más balanceada desde el inicio del cultivo, apuntando no solo a los nutrientes tradicionales que son nitrógeno y fósforo sino ver también lo maso y lo micro nutrientes.

“Es este cultivo se está poniendo foco en lo que es zinc y eso tiene un efecto en el inicio del cultivo y en consecuencia también en los rendimientos. Además procuramos que el productor no utilice un solo nutriente sino que implemente una mezcla química compleja apuntando a la fertilización balanceada”- señaló Cantero.

En el caso del trigo se apunta a una fertilización nitrogenada buscando el mayor potencial de rinde de cada lote. En cuanto a soja se está realizando un análisis antes de la siembra para ver los niveles de fósforo que existentes y de ahí se eligen las mezclas químicas complejas que apunta no solo a fósforo sino también a boro y zinc.

“La campaña de gruesos se viene trabajando muy bien, apuntando a que el productor tome conciencia de lo que tiene en sus suelos y de ahí haga una buena planificación de nutrición para lograr un buen uso de recursos y potenciar su rendimiento”-sintetizó Cantero.

Por último Patricio Ramón, del Servicio Técnico NEA Dupont Agro, hizo referencia a que las condiciones hídricas condicionan la entrada a los lotes. No obstante se sostiene la política de la aplicación de los pre emergentes para anticiparse a las malezas.

“A causa de las continuas lluvias muchos de los productor pierden su eficacia y a su vez las malezas atrasan su germinación por lo cual los manejos están siendo un poco más complicados. En este sentido, lo ideal sería sincronizar la aplicación de los productos con las lluvias y por consiguiente con la emergencia del banco de semilla del lote”-señaló Ramón.

Además adelantó que Dupont Agro lanzará este año ITUS, un pre emergente para maíz, anticipándonos al nacimiento de las malezas. Para lo que es soja, Ramón dio buenas perspectivas aunque se estima que habrá mayor presencia de amaranthus palmeri y yuyo colorado. “En este caso vamos a tener que anticiparnos previamente con productos contundentes”- concluyó.

REDACCIÓN: Campo en Acción