“Empezamos con un esquema agrícola común en la zona, basado en cultivo de gruesa, después empezamos a ver un equiparado de rendimiento en los cultivos de fina y ahí empezó a entrar en juego el trigo. Luego con las dificultades del trigo en comercialización abrió la puerta para otras especies de invierno que empezaron a moldear una secuencia de cultivos como la arveja que terminaron formando parte del esquema agrícola antecediendo a los cultivos de maíces de segunda con muy buenos rendimientos. La solución para la arveja se hizo a través de la conversión de granos en carne de cerdo y alimentación vacuna.

La soja de segunda es antecedida por cultivos de trigo, cebada cervecera, colza y comenzamos a incorporar en la zona de Tala y de Lucas González el cultivo de lino que está volviendo a renacer y viene de la mano del consumo directo”- sintetizó Cerini en dialogo con Campo en Acción.

La producción mixta en El Hinojo

“En 2012 implementamos en dos campos de la empresa agricultura certificada, al año siguiente le sumamos una norma nueva que promovió AAPRESID que agrega una pata más en lo social de lo que son las certificaciones. La realidad es que nos ha enseñado a trabajar dentro del marco legal cuidando el ambiente, la sociedad y apuntando a la mejora en la parte productiva.

La empresa estaba en una situación inicial de crecimiento horizontal y nos dimos cuenta que quedamos atrapados en un esquema en el que lo único que se podía hacer era crecer a través de más hectáreas.

Así el grupo CREA del cual somos parte empezó con una investigación de agregado de valor a los granos que estábamos produciendo, se empezaron a generar proyectos y de esta manera en 2012 se concretó la construcción de una granja de porcinos que hoy llega las 600 madres donde canalizamos un 15/20% de granos que generamos con la agricultura”.

“El mejor remedio para los precios altos son los precios altos”

“Es muy difícil que la rentabilidad se mantenga alta en el mismo negocio durante mucho tiempo. Además es muy difícil que la rentabilidad este siempre en el mismo eslabón de la cadena, por lo tanto nuestra visión es que es interesante tratar de formar parte de otros eslabones como para capturar la rentabilidad puntual de ese año.

Entonces participamos en la cadena de valor de maíz, del negocio de la producción de carne de cerdo y le agregamos estar cara a cara con el consumidor, la carnicería.

En la actualidad tenemos tres puntos de ventas en Paraná, estamos enviando alrededor de 130 capones semanales a faena para la elaboración de productos frescos y chacinados para distribuir en nuestras carnicerías.

En vista a un fututo, el objetivo a corto y mediano plazo, es básicamente profundizar el agregado de valor. En primer lugar tratar de consumir el grano más localmente.

“No tenemos del todo claro hacia dónde ir ya que la agrícola está muy golpeada por la campaña pasada, el cerdo esta perjudicado por la seca más la devaluación y el comercio minorista se ve afectado por la economía del país. No obstante, si vamos a profundizar el agregado de valor en origen de los productos iniciales de cada una de las cadenas que estemos formando”- concluyó.