El productor apostó fuerte al trigo, luego de las cosechas fallidas de maíz y soja en la última temporada. Se registraron granizadas en distintos puntos del departamento, pero sin afectar a los cultivos.

Desfinanciados pero ciento por ciento optimista, el chacarero que trabaja en la agricultura se la jugó por el trigo, aunque las cuentas sacadas a principios de campaña ya no son las mismas. El gasoil, aumentó varias veces, y volvieron las temidas retenciones. Dos noticias que no fueron recibidas con agrado por el sector.

Pablo Glagosvky, ingeniero agrónomo, que trabaja en el Departamento y en distintos lugares de la provincia, dijo que las lluvias del “último fin de semana fueron muy dispersas”. Hubo lugares donde no “cayó una gota y otros con 70 milímetros”. Mencionó que el sureste del Departamento se “registraron los eventos más destacados y alguna granizada”.

La lluvia no afectó al trigo, cultivo que “arrancó muy bien con un invierno con temperaturas bajas que lo favorece”, y agregó que “los lotes están en una condición muy buena en un 90%”, aunque resta saber qué va a pasar en octubre, mes clave, que es donde se provoca el “llenado de grano”. Si octubre es muy caluroso el “llenado será menor, pero si las temperaturas son más frescas, será muy bueno como en el sudeste bonaerense que es donde se “siembra más trigo”.

Glagosvky explicó que en la zona se registró un aumento de la siembra del cereal que tiene sus motivos. Uno de ellos es la de que la “salida más rápida para recuperarse de dos fracasos rotundos pasaba por el trigo y a eso apostó, sin medir los riesgos, sin estudiar demasiado si era bueno o malo el negocio”. Por otro lado indicó que los precios a “venta a futuro son buenos, 190 y 210 dólares a cosecha”, aunque cuando se acerca el “período de cosecha tiende a bajar”, aclaró.

Dijo que en el rubro productor agrícola existe mucha variedad y realidades diferentes. Está quien “entra al negocio, quien sale y quien se mantiene”, detalló y agregó que también están aquellos que “vuelven a endeudarse y hacer una nueva apuesta “. En general, la “campaña que viene está financiada”.

Por otra parte, opinó que las retenciones juegan en contra, porque el precio “termina siendo menor”.

Indicó que los costos de encarar una producción están dolarizados. Pasa con “los insumos y con los valores que se puedan conseguir a cosecha”. Comentó que “lo único que se paga en pesos son las labores, tales como “siembra y cosecha”, prestadores de servicios y aquellos que hacen todas las tareas, hoy afectados por la suba de los combustibles”, acotó.

Asimismo, dijo que el movimiento de las maquinarias agrícolas es normal, porque los campos se vuelven a sembrar, aunque algunos fueron destinados a ganadería.

“La mayoría se volvió a alquilar, o el mismo dueño sigue con la agricultura”, comentó. En lo que tiene que ver con el maíz, señaló que le “tocó una buena fecha de siembra con una buena emergencia, que las semillas que uno siembre llegue a ser una planta”. Agregó que ha “llovido en las últimas semanas en un momento en que el cultivo no lo necesita demasiado”.

Sobre la intención de siembra, la superficie es estable en la zona, debido que el destino es local y es “muy poco lo que va a puerto”, teniendo en cuenta que el cordón avícola es muy importante, con granjas avícolas y un número importante de porcinos que tienen como principal alimento el maíz.

Fuente: ElDía