En comunicación con Campo en Acción Radio, el decano de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNER, Pedro Barbagelata habló sobre las aplicaciones de productos fitosanitarios, un tema candente en la provincia de Entre Ríos.

¿Es válida la preocupación de la sociedad en el uso de productos fitosanitarios?

- Entiendo que es perfectamente válida, la aplicación de productos fitosanitarios son productos que se usan para controlar malezas, enfermedades, bacterias, hongos. Tienen distintos grados de toxicidad y pueden potencialmente causar algún tipo de problema al ambiente o a la salud humana en tanto y en cuanto se usen mal.

Por esto la preocupación de la sociedad respecto al uso y al control del uso es absolutamente valida, así como lo es el reclamo por la disposición de la basura en las ciudades que causa un gran impacto ambiental y como la sociedad no lo hace propio el Estado tiende a darle poca importancia.

Creo que cuando la sociedad se apropia de estos temas ejerce presión y la forma de reaccionar a esto es hacer las cosas mejor.

El rol de los medios de comunicación

- Hay información científica sobre el tema, en general, toda la tecnología que se usa para la producción vienen de la investigación científica que van descubriendo tecnología de manejos y productos químicos que hacen que mejore la producción.

Obviamente hay una presión económica de las empresas que invierten mucha plata para desarrollar productos.

Las instituciones del Estado también producen información científica sobre el uso y el impacto del uso de estos productos.

Lo importante es que muchas veces -según el sector que quiera usar la información- se hace una extrapolación de la información obtenida dentro de un laboratorio con lo cual se le da un tinte calamitoso a los resultados, que solo se podrían producir en una catástrofe en el mal uso de determinado producto.

Por eso acá es fundamental el rol de las empresas privadas pero también de las instituciones del Estado para investigar realmente el uso de los productos sea seguro para la sociedad, para la salud pública y para la producción obviamente.

¿Estos productos se usan en otros países?

- Claro, todos los productos que usamos están autorizados legalmente con los fines específicos para lo cual están autorizados. Obviamente muchas veces se usan según el catálogo de dicho producto. Además son productos que primero se usan en otros lugares del mundo y después lo usamos nosotros.

Lo que se resalta muchas veces que después de un tiempo hay productos que no tienen efectos deseados por lo que se prohíben en general en todos los países.

Sobre la sentencia judicial que prohíbe las aplicaciones en cercanías de las escuelas rurales ¿cuál es tu opinión?

- En realidad las aplicaciones de fitosanitarios se rigen por una Ley de Plaguicidas de la provincia que hace referencia a cuáles son las mejores condiciones de aplicación y las distancias recomendadas.

En esa ley habría un vacío legal respecto a que no hacían mención a las escuelas rurales. Nosotros lo hemos discutido dentro de la Universidad, hace un par de semanas lo discutimos con el fiscal de estado de la provincia, obviamente hay distintas posturas pero evidentemente hay un vacío legal por lo cual se está tratando de reglamentar ese punto haciendo referencia a las escuelas rurales.

En este sentido, se logró un acuerdo con la participación de las instituciones tales como el INTA, el colegio de Profesionales de la Agronomía de Entre Ríos, la facultad de Ciencias Agropecuarias, y se realizó un proyecto de resolución donde se dictamina y se hace referencia específicamente a las escuelas rurales prohibiendo la aplicación de productos fitosanitarios a una distancia de 100 mt terrestre y 200 mts áreas.

Esta es una resolución de la Secretaria de la Producción que según los entendidos legales debería evolucionar en un decreto para que tenga validez en todo el territorio de la provincia.

Ahora este proyecto está en manos de la provincia, creemos que llegar al decreto reglamentario no va a demorar mucho más tiempo.

Cabe aclarar que esto también contempla las aplicaciones a contra turno (que contempló el primer fallo que luego la justicia eliminó), de esta manera permite hacer las aplicaciones por la tarde o fines de semana, cuando no se dicten clases en los establecimientos educativos.