Al momento de analizar cómo cerraron los números del productor frente a la cosecha de soja, Oscar Mildenberger, asesor de La Agrícola Regional Coop. Ltda. de Crespo, analizó que “hacia el centro de la provincia hubo rendimientos algo más bajos que la zona pampeana, donde hubo rindes aceptables aunque no sobresalientes, pero que permitieron al productor cerrar los números, aunque sea en campos arrendados. En los departamentos del centro-norte de la provincia, como es el caso de Villaguay, la situación fue un poco más complicada, puntualmente en el caso de campos arrendados los numerosos fueron bastante justos y en algunos casos con perdidas”.

En cuanto al maíz, el profesional explicó que es un cultivo que, en general, “se hace sobre campo propio y básicamente pensando en una utilización de uso propio del grano, por lo cual los números son distintos y le van a cerrar. Este año, el productor en campo propio cerró en alrededor de 5.000 kilos/hectárea, sin tener en cuenta el alquiler, no habría grandes problemas y los números fueron más o menos aceptables. El problema siempre es en campo arrendado”.

Con respecto al presente ciclo agrícola, Mildenberger comentó que en la zona de influencia a la cooperativa no se siembra ningún cultivo alternativo al trigo en lo que respecta al invierno. “En trigo quedó sin sembrar el orden del 10% de la intención de siembra, ya que hace casi 20 días que las labores se han visto obstaculizadas por la lluvia. Prácticamente este año esta jugado en cuanto al cereal”.

Acerca de los lotes que no fueron destinados a la siembra del cereal, el profesional explicó que “la mayoría en esta zona serán destinados a maíz, dependiendo de qué tipo de barbecho o con que agroquímico se trabajó en los barbechos para el caso de siembra directa, es decir barbechos que puedan permitir la siembra de maíz. De no ser así, seguramente estos lotes irán directamente a soja”.

En cuanto al plan de manejo de los cultivos, el asesor indicó que actualmente no se presentan problemas sanitarios, pero “hay que hacer todo en materia de fertilización nitrogenada, si es que no se ha hecho. Aunque es cierto que los números son escasos, la situación será peor si no se aplicamos algo de nitrógeno, ya que después tendremos que estar más atentos a la presencia de enfermedades foliares y también al fusarium por las condiciones climáticas. Actualmente hay un pronóstico de lluvias superiores a las normales, lo que implica mayor riesgo de la presencia de enfermedades”.

De la redacción de Campo en Acción