La superficie implantada de este cultivo superará a años anteriores, por lo que es importante el control de las enfermedades. A esta altura el trigo mostró presencia de septoria, oídio y mancha amarilla.

La campaña de trigo 2018/2019 promete ser la más importante de los últimos 17 años. En esta oportunidad, el área implantada será de 6,1 millones de hectáreas, con un volumen proyectado al cierre de 19,1 millones de toneladas.

Con un avance del 90 por ciento de la superficie sembrada, es momento de centrar la mirada en las enfermedades que ya están presentes y en las que puedan surgir.

Al respecto, Norma Formento, fitopatóloga de INTA Paraná explicó a Rodrigo Bonazzola de Agrofy News que hasta el momento encontraron septoria, que no es algo que preocupe para la zona, oídio y en las últimas semanas se empezó a visualizar mancha amarilla.

Por su parte, el fitopatólogo del INTA Enrique Alberione destacó que el área de Marcos Juárez no presenta problemas sanitarios. Esto se lo atribuye al alto nivel de heladas que hubo en el último tiempo que no permiten el desarrollo de este tipo de enfermedades.

Si bien el trigo atraviesa aún un proceso de crecimiento, es importante hacer un análisis de lo que el productor se puede encontrar, teniendo en cuenta el gran ataque de roya amarilla en la campaña anterior. En este sentido, Formento destacó: “Se espera una campaña con temperaturas bajas y tengo una idea de que no es un año favorable hasta el momento para la roya amarilla”. Además, agregó: “Viene un invierno frío distinto al de la campaña anterior, pero es muy temprano opinar porque el clima es cambiante”. La región que comprende Paraná, Entre Ríos fue una de las más golpeadas por la roya amarilla en la temporada anterior.

Para el desarrollo de este enfermedad es necesario tener temperaturas por encima de los 20 grados. Además, es importante tener horas de mojado foliar y humedad relativa. En relación a estas características la fitopatóloga de Paraná afirmó: “Por ahora no estoy viendo nada que me haga opinar que esto pueda pasar esta campaña, sobre todo basado en la experiencia”.

En cuanto a la región de Marcos Juárez, Enrique Alberione mencionó: “La roya amarilla puede aparecer cuando calme la presencia de heladas. Desde la segunda quincena de julio en adelante vamos a tener algún inicio de la roya amarilla”. También destacó que esta campaña va a ser diferente a la anterior, ya que en 2017 hubo condiciones más húmedas, temperaturas elevadas y mucha nubosidad.

QUÉ Y CÓMO COMBATIRLO

Según los referentes del INTA, el trigo mostró diferentes presencias de enfermedades, en esta primera etapa del desarrollo es visible la mancha amarilla. En este sentido, Alberione recomendó que es conveniente no controlar los ataques iniciales de esta enfermedad y dejar que la enfermedad siga su desarrollo. Además, agregó: “Cuando la planta comienza a crecer, la enfermedad se diluye y se podría pensar en control químico ya con el encañado del cultivo y si está sembrado en un rastrojo de trigo”.

Por su parte, Formento explicó que la aparición y el tratamiento de las enfermedades va a depender mucho de la variedad que el productor eligió, principalmente si apostó al rendimiento en lugar de la susceptibilidad. Al respecto, el fitopatólogo de Marcos Juárez aclaró que con el aumento de la temperatura la roya amarilla va a aparecer, porque este año se volvió a sembrar una buena superficie con material susceptible.

Para combatir la roya amarilla recomiendan controlar la enfermedad recién cuando son visibles los primeros manchones, para evitar que siga con su desarrollo. Alberione destacó: “El año pasado la lectura que sacamos es que no es necesario que aparezcan los manchones para aplicar, porque en las parte donde se veía que los lotes estaban sanos abajo la enfermedad estaba. En esta campaña el productor deberá tener la precaución de observar también los sectores de los lotes donde aparentemente el cultivo está sano.

Ambos profesionales coincidieron en que el factor clima es una pata fundamental para el desarrollo de las enfermedades. En este caso las condiciones pueden ser cambiantes y se deberá estar atentos a cómo se desarrollan a lo largo de la campaña.