La cosecha de otoño es un buen broche para una cosecha de miel que sin dudas estará atravesada por la incertidumbre de la crisis mundial por la pandemia.

Una nueva zafra está llegando a su última floración y las expectativas son grandes. En toda la zona de Entre Ríos han andado muy bien tanto la chilca como el eucalipto. Corrientes también aporta buenos kilos. Un dato que refleja el volumen importante de la cosecha en la provincia entrerriana es el hecho de la falta de tambores, las previsiones de recipientes de almacenaje no alcanzaron.

Los productores que arriesgaron e hicieron la vuelta completa: monte, pradera, costa e isla podrían redondear un promedio de 100 kg. por colmena, digamos que van a conseguir buenos frutos.

Todos coinciden en una mayor calidad de la miel producida, también en muchas regiones del país se ha cosechado miel más clara y hablan de una producción de miel igual o mayor al año 2019. Estiman que rondará las 70 mil toneladas y así lo resalta el trabajo publicado por PORTAL APICOLA.

Sin dudas que la realidad actual está marcada por la incertidumbre, algo que se manifiesta tanto en lo que tiene que ver con la logística de la cosecha en sí como también en la operatoria de comercialización del producto. ¿Se podrá vender, qué pasará con los plazos de pago y con el precio? Son algunos de los interrogantes al día de hoy y forman parte de los relatos de los apicultores consultados.

Jorge Pitter (Paraná), Consultado sobre la situación actual expresó; “Recién estamos arrancando con la cosecha de otoño pero viene bastante bien, estamos comenzando y viendo como encaramos la cosecha. En cuanto a los traslados por el momento no hemos tenido problemas, es importante tener la documentación respaldatoria: certificados, renapa, constancia de inscripción y a eso le adicionamos un certificado de la Cooperativa respaldando la actividad de los socios como para darle un marco institucional”.

José Vallejos (Concordia) por su parte señaló: “Ha venido un año excelente para el eucalipto, el mejor de los últimos 20 años, bastante temprano en relación a otros años. Creo que podemos hablar de un promedio de 40/45 kg. por colmena y en algunos lotes un poco más. Pudimos dar una vuelta completa y después nos agarró la cuarentena. Tendremos para unos 15 días ininterrumpidos más de cosecha y esperamos que no se venga el frío porque se complica para cosechar y extractar. Finalmente agregó, hay mucha incertidumbre respecto a quienes pueden o no circular, pero un requisito esencial es el uso de guantes y barbijo”.

Gustavo Sack (Gualeguaychú), describió el siguiente panorama: “En esta zona hay poca chilca, lo que más está entrando es carqueja, las luvias llegaron tarde así que ya estamos cerrando las colmenas. El eucalipto viene muy bien, estimamos (Cooperativa FECAER) un promedio de 30 kg. por colmena pero va a ser más porque mientras haya temperatura va a seguir. La isla también viene muy bien. El año pasado el total de la cosecha de la cooperativa con 12.000 colmenas fue de 690 tambores y esta temporada va a superar los 800, anduvo mejor”.

Por su parte, Pablo Vallejos (Monte Casero, Concordia) relató: “En esta época siempre hay mucha lluvia y ahora nos está favoreciendo, el clima nos está ayudando un montón porque llueve y después tenemos días de baja humedad y eso favorece mucho la cosecha porque la miel de eucalipto normalmente entra con mucha humedad a la sala. Se espera una buena cosecha, debemos andar por la mitad de ella. Calculo que en la floración cosecharemos alrededor de 15 kg. por colmena, una buena cosecha serían 25 kg. pero venimos de años malos, se perdieron muchas colmenas y el manejo se resintió mucho”.

Juan Kussrow (Todd, Bs. As.),

En la zona de islas tuvimos dos semanas de lluvias, ahora se ha acomodado y vamos a tener una buena cosecha. La mayoría está empezando a sacar miel, no una locura ni los promedios que se decía pero va a cerrar en los 45 kg. promedio (falta todavía). Para los isleños será una excelente cosecha mientras que para los que llevamos las colmenas los números serán distintos porque los costos de producción son altos: llevar gente, el transporte, gastos para subir y bajar el material, alquiler del campo que va de 2/3 y hasta 5 kg. de miel por colmena.

Se está sacando muy buena miel, con buena relación fructosa/glucosa. El apicultor está trabajando bien, ha mejorado la manera de trabajar., ha entendido que la trazabilidad es una herramienta importante. La apicultura es una actividad bastante informal. Con el renapa al día y la declaración jurada se puede circular, también se controla las medidas de seguridad e higiene como así también no más de dos personas por habitáculo, aunque a veces depende del criterio de quien controle. El traslado a la isla está complicado porque si la lancha quedó en la guardería del club en este momento están cerradas. Hay que dirigirse a prefectura y los controles son exhaustivos. Es lo que corresponde”, declaró.

Para concluir, Juan también hizo referencia a la comercialización y dijo: “La preocupación es si los mercados van a cerrar o si van a comprar miel. Este es el peor momento para la apicultura porque es cuando hay que afrontar los pagos de personal, tambores, etc. También esperamos que no se aprovechen de la situación mundial para bajar el precio”.