Los festejos por las 100 ediciones de la muestra de la correntina Sociedad Rural de Curuzú Cuatía dieron el marco a la 35° Exposición Nacional de Hereford y Campeonato de Terneros y, la celebración fue completa cuando se comprende que la raza señera de la Argentina lució su estampa en toda su dimensión.
Nadie en el lugar dejó de destacar la excelencia de los ejemplares en competencia y mucho menos María Luisa Sardá, cabañera de Federal y conductora de la Asociación Mesopotámica de la raza: “El balance es muy bueno, la jurado Carolina Garciarena trabajó mucho para establecer las premiaciones porque se ponderó lo parejo de los animales”.
La productora, promotora central de Hereford en la región, aportó incluso que “los criadores tienen para elegir entre muchos muy buenos reproductores porque lo que necesitan está disponible”.
Garciarena cumplió con su tarea en un contexto especial dado que en diversos momentos se hizo mención a Juan Manuel, su papá, un admirado ganadero argentino. “Mi viejo tenía un ojo tremendo para los Hereford, fue un maestro en todo sentido y aprendí a su lado”, contó la mujer a Campo en Acción.
De su labor, habló acerca “del nivel de animales que entró en cada categoría porque fue espectacular. Resultó un placer jurar en esta pista de Curuzú. Los criterios en hembras fueron buscar que sea posible hacer la diferencia para cada cabaña, porque el objetivo de una madre es dar buenos terneros”.
Al referirse a los toros ponderó el volumen y color y de los puros registrados sentenció que “estuvo pareja la torada, las brechas de hoy en día casi no existen, y se termina marcando diferencia en los detalles. La raza Hereford es de alto nivel y quizá no tengamos la cantidad que necesitamos porque produce muy bien en cualquier ambiente del país”.
Por su parte, José María Morrogh Bernard, directivo de la Asociación Argentina de Hereford valoró que en la expo correntina “se cumplió el objetivo de promover las cabañas de la región ya que hacemos un aporte genético clave, incluso con establecimientos de todo el país”.
En cuanto al escenario, el dirigente evaluó: “A pesar de que vivimos una situación macroeconómica compleja y de que está bien adentrada la zafra de toros, los productores siguen eligiendo mejorar en genética. Se invierte y se lo hace a largo plazo, lo cual es un mensaje muy positivo para toda la economía ya que aquí nadie piensa a corto plazo”.
En ese marco subrayó que “como país estamos en condiciones de producir para los mercados interno y externo. Desaprovechamos grandes excedentes en el exterior que impactan en el ingreso de divisas con un poder multiplicador tremendo”.
La labor de José Luis Ganis, de cabaña Don Arístides de Federal, es un ejemplo apropiado para reforzar el pensamiento de Bernard ya que se trata de un productor con una explotación de las llamadas jóvenes que crece a fuerza de inversiones en manejo, conocimientos y genética. “A este 2022 lo estamos coronando con una suma de éxitos”, dijo antes de valorar los premios obtenidos tanto en Curuzú como en las rurales entrerrianas donde participaron. “Que una cabaña tan incipiente se lleve galardones de todas las exposiciones a las que fuimos este año es muy alentador. Estar acá es un gran logro”, sentenció.
Y Hernán Heggs, de cabaña Tres Colonias, de Villa Elisa, especificó que de la Rural valora la oportunidad de “compartir opiniones y conocimientos, es gratificante participar de muestras como la de Curuzú Cuatiá. Sacamos premios, lo que no es poco y nos vamos conformes, satisfechos pero lo esencial es elevar la calidad de Hereford. Los animales nuestros gustaron y nos marcaron que tenemos un futuro promisorio, lo que nos da confianza”.
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