Los precios de la hacienda están descalzados desde hace meses en relación a la inflación. La suba anual de la carne en pie en octubre 2022 contra octubre de 2021 ha sido de 47,3%, muy por debajo de los valores de la inflación.

“Los costos de producción de la misma, sin embargo, se han incrementado por encima del ritmo inflacionario”, advierten desde la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa .

Eso sumado a un mercado interno –principal demandante de la carne vacuna- con un menor ingreso por la caída del salario real y una oferta acelerada de hacienda producto de una sequía que no da tregua –ya que no hay pasto para retener hacienda-, además de las intervenciones a las exportaciones de meses, sumado a un proceso recesivo tanto en Europa, como en China con valores más bajos de los corrientes.

inquietud en un sector que atraviesa un momento complicado.

Por su parte, la comisión de Ganadería de Federación Agraria Argentina advirtió que no se habla y se sigue sin tomar medidas de fondo sobre los múltiples estándares sanitarios ni sobre las retenciones a las exportaciones de carne.

“No se discute sobre la altísima carga impositiva que hace que casi un tercio del precio del kilo que se paga en góndola sean impuestos, o de la falta de transparencia en materia impositiva”, dicen en la entidad.

Además, reclamaron por una quita en las retenciones a la carne para recuperar los efectos perdidos por el aumento de costos. Según la entidad, la ganadería argentina está atravesada por la profunda debacle económica que vive el país. “Paradójicamente, somos en el mundo el país de la carne, y sin embargo cada día hay más pobres e indigentes en Argentina para quienes consumirla es un imposible”, argumentaron.